La principal diferencia con una empresa de reformas al uso es que nosotros aportamos a la reforma la experiencia que acumulamos alojando huéspedes, sabemos lo que se le pide a un alojamiento turístico y lo que no, y nunca perdemos de vista que se trata de un negocio, la rentabilidad manda por encima de cualquier otra consideración.
A la hora de reformar buscamos siempre durabilidad y precio, aunque sin comprometer el acabado final. Se trata de conseguir aspecto de lujo, precio de saldo, durabilidad máxima y mantenimiento escaso, ¿difícil? Afortunadamente la gran cantidad de competencia que existe en el sector ha hecho evolucionar los materiales de construcción hasta conseguir una paleta de opciones amplísima.
Antes de empezar, basándonos en la ocupación media y en el precio medio por noche de propiedades similares, calculamos una estimación de ingresos, en función de esta, y acotado por el umbral de rentabilidad esperado, obtenemos el presupuesto máximo de la reforma al que descontamos una parte para cubrir posibles desviaciones. En resumen reformamos teniendo en cuenta las posibilidades de la propiedad.
No hace falta gastar una fortuna para tener una propiedad ideal para el alquiler turístico, muchas veces es suficiente con una pequeña remodelación de no más de 5 o 6 mil euros, ten en cuenta que cuanto menos gastes en la reforma antes empezarás a rentabilizar el alquiler.
Te ofrecemos la posibilidad de financiar la obra con una cesión del alquiler por el tiempo necesario hasta recuperar el importe de la reforma. De esta forma no pagas nada y al final del periodo obtendrás tu propiedad completamente disponible y reformada, y además te aseguras de que, por nuestro propio interés, el presupuesto de la reforma será el más ajustado posible.
* Previo estudio de viabilidad de la propiedad a reformar.
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